domingo, 30 de septiembre de 2012

Mensaje 17 Agosto 2012








Soy Yahvé vuestro Dios, hijos tan queridos, en verdad les digo, que Yo ya os estaba esperando desde hace un tiempo que me dijeran, Señor. Aquí están y vengan conmigo, a decirme que me aman, y a quedarse para siempre. Ya no quieren regresar al mundo, ya se cansaron de las cosas del mundo. Supieron lo que es el mundo y las cosas que hay en él, las cuales muchas les estorban para llegar al Reino. Pero aquí están para adorarme y decirme.  > Benditos seas porque te acordaste de nosotros. Pensar en nosotros, desde antes de todos los tiempos, y nos diste la vida. Oh Señor, que grande eres y que infinita es tu Misericordia. Señor, contemplo mi cuerpo, pero no se lo que hay en mi interior. Pero como no veo mi interior, solo se que dentro de mí, creaste tantos órganos, que dentro de mí, hay tantas venas donde corre mi sangre, desde mi cabeza hasta mis pies. Oh Señor tu grandeza contemplo al pensar; dentro de mi cabeza hay un cerebro. Cuantas cosas hermosas has hecho en mí Señor; están mis miembros a la vista,  mis órganos que son vistos por muchos médicos. Pero también Señor Dios, mis sentidos y me contemplo todo, y digo, que grande es mi Señor, que hermoso eres Señor. Al contemplar  tu grandeza en mi persona, que grande eres Señor, al contemplarme yo mismo. Me das el agua, has creado el sol para  mi, y me das el viento para respirar. Y todo lo creaste pensando en mi, que grande eres Señor, contemplo tu grandeza,  y señorío, en cada cosa que has creado, bendito seas.   > Me lleno de alegría cuando ustedes contemplan lo que Yo he creado, y se contemplan ustedes como obra hermosa de Dios. Porque son creados a imagen y semejanza de vuestro Dios, y Señor, benditos sean.

Hijos amados, algunos vienen a quedarse conmigo,  Pero otros vienen a decirme,  tengo mucha preocupación, concédeme lo que te pido.  Pero no me dicen Señor te amo, simplemente vienen y me piden. Me piden y me vuelven a pedir, pero muchos hasta con exigencia. Y hasta dudan o condicionan su Fe.  Y Yo te digo, Yo tu Señor Todopoderoso estoy en mi Iglesia, y con mi Iglesia. Y aquel que va fuera de la  Santa Iglesia Católica, ya no está en la verdad.  Está  fuera de la Casa de su Padre, está fuera de la Casa de su Madre, no porque Yo no les  ame, Yo les amo, pero muchos de mis hijos,  se van a otros lugares, donde dicen adorar al Señor, alabarle y bendecirle. Saltan,  brincan y danzan, pero muchos de  ellos  están en pecado mortal, y muchos vociferan contra mi Madre Santísima, y la calumnian. Dañan tanto aquellos mis hijos, al quitarles el amor de mi Madre Santísima, y los dañan tanto al quitarles el amor a la Sagrada Eucaristía.  Es más creo que nunca me han amado,  y que nunca me escucharon.  Creo que nunca amaron a mi Madre Santísima, pues les digo Yo soy el Señor, y solamente tengo una esposa Mi Iglesia Santa, Católica, Apostólica, y Romana. Yo soy Dios el único, no hay fuera de mi otro, pero algunos van y se hacen de algo  o alguien su dios, y eso les  va desviando del camino. Y cada vez van contaminándose más; como  aquel que empezaba a caminar, recuperándose de una gran enfermedad, vuelve a caer, muere y dice,  Oh Señor, acaso un día Tú me has escuchado en la  vida.  Porque hay ignorancia, si les digo esto es porque estoy con ustedes, y porque Yo mismo soy el Señor.  Igual Yo a mi hijo muy amado Abraham, Yo quiero ver cuanta fe, y cuanta esperanza en vuestro Dios y Señor, cuanto creen en Mí, y cuantos creen que estoy, y me quedo en ustedes. Pero muchos de mis hijos solamente van a que les de el alivio que necesitan. Pero van con satanás, van y se meten en esos lugares donde es antesala de satanás, y reina satanás, con aquellos servidores suyos, con aquellos satánicos. Que también os les digo, porque todo aquel que hace, lo que no es de su Señor, está a favor de satanás. Aun muchos que ponen su confianza en el horóscopo por la mañana, eso no viene de Mí, pues ya están poniendo su confianza en alguien, y en algo. Y satanás empieza hacer su obra, porque ya están abriendo puerta. Si les digo esto es para que no salgan de la Casa de su Padre, Yo soy Jesús Sacramentado. Yo solamente estoy aquí con mi querida esposa mi Santa Iglesia Católica, que son todos ustedes. Todos mis hijos, el Papa, y obispos,  mis hijos amados sacerdotes, que son hombres también y muchos de ellos me hacen sufrir mucho.  Me hacen llorar, muchos de  esos mis hijos,  pobrecitos, se dejan llevar por su querer. Oren mucho por ellos, benditos hijos tan amados. Yo soy Jesús Sacramentado y Yo les doy vida en los Sagrados Sacramentos. Tienen vida en Mí en los Sacramentos, tienen una Mamá, la más hermosa, la más buena, la más Santísima, y la más Purísima, y es la Reina del Cielo y de la tierra. Ella es vuestra Mamá, a ella se le ha confiado todo lo creado, y os les digo Yo mismo los entregué a mi Madre tan querida, como sus hijos.  Si les digo esto es para que ustedes, que vienen y me piden, pidan con confianza, y con fe. Esperando de vuestro dios y Señor, y así como mi hijo muy amado Abraham, así esperen hijos, que Yo no los voy a dejar. Yo no les desamparo y ustedes que esperan en vuestro Dios y Señor, con un corazón abierto, y con una fe firme. Yo digo benditos sean mis hijos, les doy más de lo que ellos me piden, porque creen, confían en Mí, y esperan de Mí. Muchos más de mis hijos vienen solo por curiosidad, a ver si adivino, y les digo lo que piensan.  Saben que, a estos mis pequeños, Yo que lo se todo y conozco su interior, solamente les digo, benditos hijos. A quien quieres engañar, creyendo que Yo no se lo que hay en tu interior, eres ignorante, pobre ignorante, tanto te he hablado. Y todavía no sabes que Yo conozco todo tu interior, conozco tus pensamientos, y deseos, también conozco esas palabras y pensamientos tontos. Al decir, voy a ver si mi Señor me adivina, a ver si es cierto. Esto me desagrada mucho, Yo no soy ningún adivino, soy  Dios. Y les digo si vienen, vengan esperando siempre de Mí, en una espera de un hijo de su padre. Benditos aquellos que me dicen.  > Señor, vengo alabarte, adorarte, y a bendecirte. Vengo a confiarte un secreto, el cual Tú ya lo sabes, pero que si Tu quieres y crees que sea lo mejor para mi, me darás lo que Yo te pido. Más lo que te pido para mis hijos, mi esposo y  mis vecinos.  Señor, yo espero de Ti, lo que más me conviene a mi y a ellos.   > Yo les amo a todos, y quiero que estén siempre en una  espera con fe, en vuestro Dios y Señor, y en mi Madre amada que no deja de interceder por ustedes,  soy vuestro Dios, Cristo Jesús.
Piensa, yo hoy pequé, ofendí a mi Señor, y en esta ofensa a mi Señor, también gané el infierno, mi Señor me ha redimido. Piensen, antes de que Yo viniera a redimirles, ciertamente estaban todos en el amor de Dios. Pero mi Madre Santísima, la Reina del Cielo, aún no estaba aquí en la tierra, y en verdad les digo, el demonio sabía que una mujer iba a venir, y le iba a pisar la cabeza. Que la serpiente iba a ser dominada por una mujer, y el trataría de morder su talón. Tembló el demonio cuando supo que María Santísima, era la que pisaría la cabeza, y mi Hija muy amada, ha recibido todo poder, en el cielo, y en la tierra y también en los abismos. A una orden de María Santísima, satanás como los perros se va aullando de dolor. María Santísima como su Hija predilecta, ha recibido de su Señor todo, y aún el Señorío que le creó. Y os les digo que el mismo infierno se estremece al solo escuchar el nombre de María. María Santísima tiene el poder para hacer todo lo que ella quiera, en la Divina voluntad de su Señor. Pues en ella está Divina voluntad, y os les digo,  antes de que María estuviera aquí en la tierra,  y antes de que ella fuera creada por su Señor. Los enemigos pensaban.  > Quién nos puede hacer a nosotros que retrocedamos. cuando se nos presenta aquel al que os quiere que nosotros le ayudemos.  Es nuestro.   > Aquellos que siempre buscan el mal, os siempre están con un temor grande de que ellos vayan a clamar a María Santísima. Y María Santísima venga y les pise la cabeza, y les haga aullar. Pues no pueden desobedecer a María,  esto dice el demonio.  > No podemos  desobedecerla, porque es ella más grande que nosotros, ella es Hija de Dios. Y a su Hija se le ha concedido todo el poder, y si ella quiere podría destruirnos. Porque el Señor Dios le concede todo lo que ella quiere y por eso temblamos,  nos da terror es a lo único que le tenemos miedo, más que a Dios, a María Santísima.   > El demonio tiene horror a María, le tiene un miedo, porque sabe que María Santísima es la Reina del Cielo y de la tierra. Y tiene todo poder también en ese lugar de castigo, donde el mal está reinando. Porque el dice, yo quiero ser rey, pero sobre todo María Santísima, hace que satanás,  lucifer, se aparte del camino, lo humilla, le pisa, le dice, retírate de aquí satanás. Y os no puede satanás nada contra María Santísima, ni tan siquiera a tener un dialogo. 
Ustedes son hijos de María Santísima, son hijos muy amados de María, y vuestra Mamá tiene todo poder. Por eso les digo que no se aparten de María Santísima, ámenla mucho, bendíganla, y díganle Mamá, tenemos hambre, frío, estoy enfermo, e intercede por nosotros.  Benditos ustedes que han aceptado en su corazón a mi Madre Santísima, con ella, y en ella están seguros.  Con ella y en ella no morirán, con María Santísima y en María Santísima, todos los enemigos que les acechan huyen de ustedes. Porque en el  regazo de María están a salvo, de todos sus enemigos. Aquellos enemigos que traten de hacerles daño, aún en ese momento de angustia, desesperación, y depresión, si claman a María Santísima, ella no les dejará en manos de sus enemigos. Muchos dicen Señor, porque muchos están ahorita cayendo en las redes del mal. Porque rechazan a María Santísima, porque ellos quieren hacer en su voluntad, y Yo les he entregado a mi Madre Santísima y no la han aceptado. Es por esto que les decía hace un momento, muchos dicen adorarme, pero están en pecado mortal, porque están vociferando, calumniando, y ofendiendo a mi Madre Santísima, y esto es un pecado mortal. Cuanto deseo que hagan conocer a mi Madre pronto, van a recibir conocimiento de mi Madre Santísima, para que le amen más y más cada día, y no se aparten de ella. Y en ella permanezcan seguros, como hijos de María Santísima, Yo les amo, soy vuestro Dios Jesús. No teman,  en María Santísima, si le  entregan con fe a María, sus hijos. Y dicen, Madre mía, aquí está mi hija, yo te la entrego a Ti. Crean que aunque esos hijos anden en el  camino equivocado, y aunque estuvieran en lo profundo del infierno, si os entregan a sus hijos, y esposo a María Santísima, ellos no morirán, y no se perderán. Porque María Santísima no deja a sus niños, pues hijos amados  sigan confiando en vuestro Dios, y en María Santísima.  Si tu hijo aún no ha recibido del consejo que tu le das,  sigue hablándole, y sigue dándole amor del cual necesita para volver. Muchos de los padres solamente maldicen,  si sus hijos andan en el  mal camino los corre. Sus hijos necesitan amor, están vacíos, y esos vacíos está pronto satanás para llenarlos, y trata de perderlos. Muchos aunque están peregrinando, y están en lo profundo del abismo, del infierno, porque se han abandonado ya, a satanás. Muchos se han consagrado, y entregado, pero si entregan sus hijos a María Santísima, no se perderán.  Porque de lo profundo del abismo, María Santísima los sacará, y nadie se interpondrá. Porque ella es la Reina del Cielo, la Reina de todos ustedes que le aman,  es Reina, y es mi Madre Santísima. Y os una Reina es venerada, y muchos de mis hijos sacerdotes, y obispos. Aún aquellos mis hijitos los laicos que dicen, María Santísima es mi Madre, en ella no temo.  Y lo dicen con fe, el mal huye y dice, con estos yo no puedo nada.  Les vuelvo a decir, en mi Madre Santísima no se perderán.
Ya fueron redimidos, la palabra ya era, la palabra es, y será.  Benditos sean ustedes que piden por mi Sagrada pasión tan dolorosa, y os mi Padre les sonríe y dice. Benditos sean mis hijos que me ofrecen en la ofrenda más grande, y más hermosa que es mi Hijo muy amado. Ofreciéndome su Sagrada pasión tan dolorosa;  me ofrecen su ofrenda en mi Hijo muy amado, benditos sean les digo, es hermosa vuestra ofrenda cuando sale de su corazón, es una ofrenda de amor.
Se con cuanto amor, preparan una gran fiesta para mi Madre amada, esta fiesta no pasará. Porque en verdad les digo, que en el último día mirarán esta gran fiesta, que con tanto amor prepararon para mi Madre Santísima. Para vuestra Madre, ella se siente muy honrada, muy contenta y dice:
> Jesús mis hijos me aman, que hermosos son, benditos sean nuestros hijos.  Oh Jesús, alégrate con ellos, quiero que te alegres en cada uno de ellos. Mira que preciosos son, fíjate dentro de ellos, fíjate en su corazoncito. Pero no vayas a ver si en ellos hay algo.  Perdónales hijo, quítales ese odio, y ese rencor. Escucha Hijo su clamor, mira cuantos de mis hijos te están pidiendo, concédeles lo que te piden.
> Madre tengo que fijarme, porque mira Madre mía, muchos de ellos traen rencor y hasta odio.  Madre mía, mira que si les doy ellos inmediatamente, se irían a malgastar lo que Yo les doy. Déjalos que sientan un poco de dolor, para que ellos también en su dolor me acompañen en esta pena. Por tantos de mis hijos que se están perdiendo, déjalos Madre mía que sean corredentores, contigo y conmigo. Déjalos para que ellos en su dolor también, tengan esa alegría de los hijos de Dios, en el Reino de los Cielos.  Madre mía,  se que Tu los amas mucho y quisieras que ellos fueran tan felices, Yo también lo quiero, pero mira que es necesario que ellos también lleven su cruz de cada día. Cuanto deseo que ellos lleven esa cruz con su Señor y Dios.  Madre Santísima crees que Yo te voy a negar algo que me pidas, para mis muy amados, cuando Yo mismo los amo, y Tú en mi amor los amas. Madre mía Yo no los voy a dejar y aunque ellos se alejaran, Yo iría tras ellos presuroso. Cuanto deseo que mis hijos sepan que son custodias donde estoy Yo vivo, pero quiero que me reciban todos los días. Acaso se enfadan de Mí. Acaso no me quieren en ustedes.  Oh hijos amados, lo que más deseo es que  con gran alegría me reciban en ustedes, y después de haber recibido el perdón de sus pecados, revestidos con ese traje de fiesta, la gracia Divina en ustedes. Yo quiero que me reciban en gracia de Dios, quiero que me coman, y me beban. O acaso no me quieren.   Yo les amo y les digo, son templos vivos creados por Dios y para Dios, y son de Dios, y como hijos de Dios, siempre en Dios, para que en Dios tengan vida en este peregrinar, y sostenidos son en el mismo Señor.
Quiero que lleven mi mensaje, que sean mis testigos, y que lleven la Buena Nueva. Ustedes me dirán, Señor yo no se evangelizar.  Y Yo les digo, aquí está mi mensaje escrito, dalo a tu hermano, diles que les amo, o acaso te avergüenzas de Mí.  Muchos de mis hijos con mi mensaje están llevando vida a muchos de mis hijos, lejos de aquí. Pero Yo voy con ellos, dejan todo por Mí, y dejan todo en este día, que dicen es mi día de descanso, y están trabajando para su Señor. Y son la alegría para muchos de mis hijos, porque Yo voy en ellos,  todos son llamados a evangelizar, con mi mismo mensaje se está evangelizando. Les digo, lean y relean mi mensaje, antes de leerlo pidan Espíritu Santo, no es lo mismo pedir Espíritu Santo, que pedir al Espíritu Santo. Pedir Espíritu Santo es pedir Espíritu Santo en ustedes, el Espíritu Santo está pronto. Pero pidan también al Espíritu Santo, Él les ama, es el amor, pidan Él no les negará nada de aquello que piden, si es para bien. Acaso ustedes en la perseverancia con que trabajan, el Señor les dejaría.  Antes Yo les podo, vengo y remuevo la tierra, los fortalezco, y les pongo agua, los caliento para que den fruto, y el fruto es bueno porque es en Mí.
Quiero que estén limpios, que estén habitados por el Espíritu Santo. Quiero que reinen ya aquí, y que sean reyes, porque Yo les he traído mi Reinado. Yo soy el Rey de Reyes, Por qué no quieren ser reyes, y prefieren ser limosneros. Prefieren traer vestiduras sucias.  Les hago un llamado, quiero que vivan en gracia  de Dios, Yo les doy mi gracia.  Sufro mucho cuando ustedes quieren perderse, cuando Yo estoy pronto para ustedes,  es tan peligroso que duerman en pecado, con un espíritu sucio, podrido, y maloliente. Este espíritu no entra al Reino de los Cielos, Yo les lavo con mi  sangre preciosa, les doy mi vida,  mi Divinidad, y mi Cuerpo. Me doy todo a ustedes para que tengan vida y la tengan en abundancia. Pero que han hecho de ustedes hijos amados. Son aquel hijo pródigo, les estoy esperando, Yo tengo en mi mano un anillo para cada uno de ustedes. Pero les digo que algunos traen ese anillo en su dedo, un anillo real, un anillo que los identifica como reyes. Muchos de ustedes traen sus vestiduras limpias, si no traen su vestidura limpia,  es mejor que dejen todo para que tengan vida, y la tengan en abundancia.  Saben Yo no he venido a condenarles, sino que he venido a librarlos de la condenación eterna. He venido a librarlos de la muerte eterna, y he venido a darles mi vida. Para que ustedes en Mí, tengan vida, y si no están en Mí, no tienen vida.

> Soy vuestra Madre María Santísima, les saludo a cada uno, benditos hijos amados.  Quiero que vivan santamente, mi Hijo les ha hablado, no permitan que el mal venga, y les haga daño en su interior, el ladrón está pronto. Estoy llorando por ustedes, intercediendo por sus necesidades. Y estoy postrada en oración, para que todos ustedes en mi Hijo muy amado, tengan vida. No quiero que se pierda ni uno solo. Se preocupan mucho por lo que vendrá en el último tiempo, ciertamente, la parusía está muy próxima hijos amados, pero quien de ustedes dice, que vivirá mejor cada día, y será más santo cada día en su Jesús.  No se alarmen por lo que venga, sino antes alármense, por a donde van a ir, después de esta vida. A dónde van a ir, o a dónde quieren ir.  Cuando está aquí la salvación, y el perdón de sus pecados, la vida nueva.  Queridos hijos,  Yo estoy con ustedes como vuestra Madre, tengo mucho dolor en mi corazón. Porque muchas jovencitas están matando a sus hijos, y los están enterrando. Y dicen nadie se dio cuenta, muchas más de mis jovencitas, hasta adultas, están usando métodos artificiales, satánicos. Les llamo satánicos porque eso viene de él, y no viene de Dios.  Están usando esos medios en los cuales muchas dicen, yo no estoy embarazada.  Saben que hijos, hay fecundación y muchos de estos mis niños, están muriendo y muchas dicen al cabo no se me logró. Mataste a un niño, mataste a una niña, y eres una asesina.  Si les digo esto, es para que lleven mi mensaje, es un pecado grave, y muchos no están confesando estos pecados. Simplemente siguen asesinando a sus hijos, y estoy muy triste, y llena de dolor. Porque muchas almas se están yendo al infierno, muchos jóvenes y jovencitas se drogan, pobrecitos hijos míos. Muchos de ellos se pierden, y siento un dolor infinito. Muchas espadas traspasan mi corazón,  si les digo esto, es para que lleven mi mensaje, para que no se sigan perdiendo almas. Cuanto deseo que vayan a esos lugares, donde hay esos antros, pero nadie se anima a ir, tienen temor de llevar mi mensaje. O poner a la vista de todos un mensaje para que lo vean, y lo lean.  Muchos se burlarán, pero también les quedará algo dentro de su corazón. Hagan lo que les pido, hay muchos asesinos que dicen, he prometido dar vida y cuidar la vida del ser humano. Los médicos, y no están cumpliendo. Muchos de ellos se han convertido en asesinos, practican la eutanasia, y el aborto. Acaso estos hijos amados, podrán entrar al Reino de los Cielos, si no se arrepienten. Si no hacen un gran sacrificio, y si no cambian su vida.
Acompáñenme en mi dolor, y en mi sufrimiento. Recen muchos rosarios y oren mucho.
Quiero pedirles que todos tengan en su casa, Sacramentales, agua bendita. Siempre tengan agua bendita, si es posible aceite bendito y  exorcizando.  Tengan siempre rosarios benditos y exorcizados, tengan siempre con ustedes cirios benditos, y exorcizados, en sus casas. Debe haber lo que Dios quiere, esas armas contra el mal,  y el Cirio encendido representa a mi Hijo tan querido. La luz con ustedes, y el agua bendita exorcizada,  si ustedes rocían con fe, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.  También mencionando con amor y fe, el nombre de María Santísima. En verdad les digo, que los  enemigos salen aullando, para ellos el agua bendita es un dolor infinito. Es para ellos un terror, mucho miedo le tienen a lo que es consagrado, y sacramentado. Bendecido, y exorcizado,  pues saben que viene de su Señor. Aunque ellos no lo quieren reconocer  como su Dios. Tengan de preferencia también con ustedes, un chal, una sevillana, o una pañoleta bendecida por un sacerdote. Lleven con ustedes siempre su rosario, y un escapulario, lleven siempre a vuestro Cristo Jesús, en su imagen de cruz, crucificado. Lleven siempre aquello que representa a Dios, y a vuestra Madre en sus imágenes. Benditos hijos amados, Yo los cubro con mi manto. Les amo, en Mí no teman, soy vuestra Madre María Santísima.

 > Soy Yahvé vuestro Dios, les abrazo soy Dios vivo, Dios verdadero. Creador de todo lo visible y lo invisible, creador de  todos ustedes, que invocan  mi Santísimo nombre. Yo estoy con ustedes, les he dado vida y la vida en Mí, no se acaba.  Mi Reino es vuestro.  Te he dado a mi Hijo, y te he dado  vida. La salvación está contigo, en mi Hijo muy amado Jesús.
Benditos hijos amados, alégrense de que sus nombres estén escritos en el Libro de la Vida. Alégrense de que sean reconocidos en el Reino de los Cielos. Alégrense cuando los injurien, cuando los maltraten, y cuando los ofenda. Porque van en el camino, y los del mundo no quieren a los que han dejado el mundo, porque ya no son como ellos. A mi Hijo muy amado Pedro, lo cubría con mi sombra, y a ustedes les he dado a mi Hijo, y en mi Hijo me doy a ustedes. Les hablo pueblo mío, mis muy amados, todos ustedes son bautizados, y en el Sagrado Sacramento del Bautismo, miembros del Cuerpo de Cristo. Mi Hijo muy amado son, y mi Hijo  está conmigo, y está  a mi derecha.  Y ustedes en mi Hijo muy amado, si permanecen en Él y Él en ustedes. Yo permanezco en ustedes, soy vuestro Dios Yahvé. Les he dado esta promesa de amor,  y les he  dado mi Espíritu. Es conveniente que dejen todo por su Señor y su Dios,  dejarían hijos amados a su Señor, Dejarían el Reino prometido y ganado por Cristo para ustedes,  y Por alguien, o por algo.  Yo les estoy hablando de viva voz, soy Yahvé vuestro Dios. Les doy más de lo que tienen, para que lleven en mi Santo nombre, y para que en la humildad, la obediencia, y en la castidad. Y también pido su pobreza, quiero que estén en obediencia, no quiero que se proclamen ustedes, proclamen a Dios. No quiero que busquen el ser reconocidos, sino hagan conocer a vuestro Dios. No quiero que se exalten, porque solamente a Dios se le exalta. No quiero que se hagan llamar maestros, porque solamente hay uno solo Cristo, mi Hijo muy amado, es el Maestro. No se hagan llamar pastores, porque solamente hay un Pastor, que es Cristo. Ciertamente Él, por medio de sus hijos, los cuales le he dado, y los cuales me los da Él a Mí, Él hace su obra.

Ciertamente les digo, María Santísima tiene todo poder. Se le ha dado como la Hija muy amada, como la Madre muy amada, y como la Esposa predilectísima. Ella ocupa un lugar en la Trinidad Santa, y la Trinidad Santa en ella. Pues os María Santísima, tiene todo poder para hacer lo que mi Hija quiera. Si ella me pide, Yo le concedo porque es la muy amada.
 > Yo les entrego mi rosario enlazado al de ustedes. Ustedes en Cristo son hijos predilectos del Padre Celestial, y todos llevan con ustedes y en ustedes, este sello de la Santísima Trinidad.  Han sido crismados, y son en Cristo mi Hijo muy amado, y como Cuerpo Místico de Cristo. Son Cuerpo de Cristo mi Hijo muy amado, como mi Hijo, tomó mi cuerpo, y mi carne. Ustedes en Cristo son mis hijos, también según mi cuerpo. Benditos hijos, soy vuestra Madre María Santísima, ustedes en Cristo reciben dignidad de hijos de Dios. Porque Cristo los hace hijos, al Padre Celestial, y en el Hijo reciben la herencia de hijos de Dios. Reciben la herencia del Reino, y son herederos.



 Les amo.




Mensaje 10 Agosto 2012








Soy vuestro Dios Yahvé. Benditos hijos, el tiempo está por llegar, la parusía está por ser. Señales ya están viendo, y los dolores de parto inician. Benditos sean todos ustedes, que siempre están vigilantes, y despiertos. Orando, y esperando con gran alegría que llegue el novio, pero saben que, muchos van a venir antes. El Señor va a venir y está con ustedes, pero os para muchos va a venir visible. Está con ustedes para los que tienen fe, invisible, pero os se deja sentir en ustedes. Y os el Señor se deja conocer también por medio de sus milagros, y su palabra. Os les digo, el Señor está con ustedes, y en el último día lo mirarán, al llegar su último día de peregrinar en este mundo, lo van a ver y se van a llenar de alegría. Y se van a ver en los brazos de María Santísima, pero si quieren ser ciegos, y desvían a otros haciéndolos ciegos, en verdad les digo que ustedes, de testigos de Dios, pueden llegar a ser testigos de satanás, al desviar a otros del camino. Os les he hablado una y otra vez, ámense los unos a los otros. Hijos, están consagrados a María Santísima, de María a Jesucristo, y saben que, el demonio está tratando de hacer su obra mala entre todos. Tratando de que haya discordia, y malos entendidos. Y muchos de mis hijos, están siempre en su querer, y no en mi Divino querer. Y muchos dicen que se consangran a María Santísima y a los Dulces corazones, pero que están haciendo con esta consagración. Os están siendo unos a los otros, como testigos de María, y como hijos de María, los intercesores para muchos que están desviados del  camino. Os en María Santísima vuestra Madre, quien llora y gime por sus hijos.  El mal siempre se va a querer hacer presente, oren mucho, siempre está tratando de dispersar, tratando de que se alejen y que muchos pierdan la fe. A satanás no le conviene que estén unificados, soy Jesús aquí con ustedes, permanezcan despiertos, y vigilantes. Y si alguno de entre ustedes, quiere quitarles la fe, y apartarlos del camino, cúbranlo con la sangre Preciosa de Jesús, y digan > Te cubro con la sangre de Jesús mi Señor, yo estoy consagrado a mi Madre Santísima, retírate satanás. Os Madre mía tu conmigo y yo en Ti, sálvame, y libérame Madre mía. No me dejes en manos de mis enemigos.   > María Santísima está con ustedes, hoy, mañana y siempre, como vuestra Madre, y vuestra intercesora.  Por medio de ella, recibe Jesús, a los que Él mismo se entrego. Les digo esto para que estén despiertos, el novio ya viene, dichosos a los que encuentre con sus lámparas encendidas, y aceite de reserva. Dichosos a los que Yo encuentre vestidos de gracia, esperando al novio, tranquilos, y sin temor. Antes bien, con gran alegría, esperando que el novio llegue.  Los desposorios de ustedes con el Rey de Reyes, están muy próximos. Os les digo esto porque muchos de mis hijos van tambaleantes, y no me gusta que se tambaleen, sino que caminen con paso firme, y digan Cristo está conmigo, y Cristo está en Mí.  Muchos me reciben y me echan fuera inmediatamente, me corren, con la lengua que me recibieron empiezan a difamar, a maldecir, y a ofender a sus hermanos. Hasta calumniar, con la lengua que me reciben, igualmente están pecando y Yo les digo, no pueden decir que proclaman a su Señor, y a su Rey. Si proclaman con una lengua embustera, y con la cual están hablando palabras, no de Dios.  Sino de satanás, al ofenderse unos a otros están dando prioridad al demonio. Yo quiero que vivan santamente si son hijos de Dios, si son hijos de María, porque quieren dar un anti-testimonio de su Señor. ámense hijos y tengan misericordia, perdonen a quienes les ofendan. Yo soy Dios, Yo soy el Señor y os he hablado del perdón, y con tristeza veo que muchos no han abierto su corazón, a la gracia del perdón.  Quién es el  más grande entre ustedes,  No el que grita más,  ni el que difama, y no el que quiere ser el poderoso. Yo los quiero humildes a todos, necesitados de Mí, y cuando llegue el mal, pónganse en oración y clamen. Que necesitan a su Señor, que su lengua está consagrada a Mi, y me reciben cada día, Que no permita que me reciban  ahora con una  lengua embustera, con una lengua que maldice, que hiere, y que hasta os aparta del camino a muchos. Y que es hasta motivo de tristeza, dolor, o ira para otros. Soy vuestro Dios Cristo Jesús con ustedes, somos la Trinidad Santa. Fueron y son, creados, redimidos y santificados por Dios. Vivan en santidad.
Todo lo que se les ha dado, pónganlo al servicio de vuestro Dios. Pero háganlo por amor, y no lo hagan por ser vistos, alabados, y exaltados aquí. Porque eso les lleva al destierro, porque solamente a Dios se le adora, se alaba y se le exalta. Solamente a Dios Todopoderoso, es a quien le deben dar la gloria y la alabanza, y adoración por siempre.
Somos los enamorados de ustedes, los eternamente enamorados, y les sostenemos. Somos luz con ustedes, y en nosotros son luz, Jesús y María, con sus hijos, con sus amados.
Quiero habitar en su mente,  en su corazón, en su voluntad, deseos, y anhelos. Quiero ocupar Yo todo en ustedes, porque son únicos para Mí, y son todo para Mí.
 > Los niños son mi fuerte, los jóvenes son mi fuerte, y la destrucción serás. Pero muchos estoy yo pervirtiendo para que se condenen, y aquellos padres de familia, no están haciendo nada por salvar a sus hijos.  Simplemente los están poniendo en mi hocico. Sí en la puerta del infierno, allí los envían.  Me alegro mucho, porque muchos ya están en el infierno. Ese Benito Abad, el que le  llaman Santo del Señor, cuanto daño me ha hecho y lo aborrezco.  > Ciertamente hijos amados, Yo permito que él hable, para bien de todos ustedes. Para que escuchen lo que el malvado habla y las pretensiones que tiene, al condenar a muchos jóvenes y niños. Por eso escuchan que son su fuerte, satanás está como león rugiente, tratando de devorar almas. Y muchos padres de familia están dejando a sus hijos, en manos de satanás. Y muchos piden por su conversión, cuando se los han entregado a la bestia, al decirles que se vayan a divertir, y que están haciendo aquí en su casa, que vayan con sus amigos, que se diviértan como ellos, y hagan lo que ellos. Y muchos de estos jóvenes se van del camino de luz, al camino de oscuridad, y al  camino de muerte. Y muchos están muriendo en pecado mortal,  muchos de mis hijos tienen relaciones sexuales los unos con los otros, y no porque vivan unidos, sino que se unen como si fueran animales, y  no como hijos de Dios. Se drogan y otros  se reúnen, porque el malvado los  reúne con él, y traman tanto mal,  y tanto daño para mis hijos.  El  mal los toma como un medio de destrucción, y miren cuantos secuestros, esto que para ustedes es terrible, y Yo les digo,  miren cuanta calumnia, cuanta crítica, esto es más destructivo aún, y aquellos están matando el cuerpo, pero no el espíritu. Y aquellos que matan el espíritu serán doblemente reprendidos, y también ocuparan un lugar muy especial en el infierno, si no se arrepienten. Porque están haciendo tanto daño a sus hermanos, y a unos robándoles la honra, asesinándolos y a otros más pervirtiéndoles, y llenándolos de satanás, al llevar chismes, y estos van con otros.  Se hace tan extensivo el pecado, que muchos no se arrepienten, porque dicen que están bien. Miren cuantos de mis hijos ven y dicen que es la moda, y se usa. Que no andarán  tan anticuados, que eso es para mojigatos, que no se vestirán como ellos. Que son modernas, y visten modernas, que no serán la burla de muchos, al traer aquella ropa que usan solamente las ancianas, que están jovenes y viven.  Yo escucho a mis pequeñas, y les digo hay tanto pecado,  y tantos abortos, que ya estoy cansado, ya me agotaron. Les hablo a cada uno de ustedes, estoy muy cansado, ya no aguanto más a mi pueblo infiel. Por eso muy pronto habrá una purificación, ya es tiempo. Muchos se están perdiendo, y a causa de que no aconsejan a sus hijos, y que los mandan a divertirse.  Muchos les dicen que se cuiden bien, que no vayan a pescar alguna enfermedad venérea, que se cuíden y diviértan mucho. Que si pecan se vale, que Dios los redimió, que solo se confiesen y ya.    Eso es estar enviando a sus hijos, al hocico de satanás, y eso no es amor. Yo llamaré a estos hijos y les diré, mira si quieren ver donde está su hijo ahorita. Y les verán aullando, y maldiciendo, en unos tormentos terribles. Yo voy a permitir y permito, que los padres vean a sus hijos sufriendo infinitamente, y sufriendo dolores terribles, y dirán.  > Señor, yo no sabía lo que hacía, solamente quise que se divirtieran. Pues mira Señor, yo sabía que el cuerpo lo diste para eso, para que se divierta uno, y yo también me divertía. Yo también iba y quería ser sexi, yo bailaba y me movía, para que vieran hombres y mujeres. Yo provocativa fui también Señor.  > Y Yo te diré, os me haces llorar como mi hija que eres. Mira tus hijos allá están perdidos en el infierno, y  tu también vas a ir a ese lugar con ellos, a hacerles compañía. Y ellos en el odio que te tienen, te desgarrarán con sus uñas, y con sus garras, te morderán y te arrancarán trozos de carne. Tu sentirás como que estás en la tierra  y tus hijos mismos, te sacarán los ojos, te arrancarán los cabellos, te molerán y no volverás a ser.  Así sintiendo cruelísimos  dolores, porque tu quisiste entregarle a satanás a tus hijos, que Yo te confié. Los que Yo quería en Mí, y conmigo en mi Reino. Y les hablo esto para que lleven este mensaje, y tengan conciencia de lo que está pasando al permitir a sus hijos, que vayan y hagan de su cuerpo, que es propiedad y templo vivo de Dios, lo que ellos  quieren. Corrijan a sus hijos, háganles saber esto. Ellos quizá no lo vayan a entender, les he hablado de que pongan sobre la mesa, y de ser posible en un cartón por un lado y por el otro, para que lo vean por todos lados. Un mensaje de amor, de conversión, y así haciéndoles saber cada día,  quien es el Señor, que quiere el Señor de ellos, y cuanto los amo. En fin hagan lo que les digo y verán resultados,  quizá no en el mismo día, ni a la semana, ni al mes. Pero sus hijos van a llegar el día en que les van a decir.   > Mamá, hoy no pusiste un mensaje de Dios, se te olvido. Mira nos está enseñando mucho Dios, por medio de esos  mensajes. Ya no estamos yendo con aquellos amigos que nos invitaban a pervertirnos, a drogarnos, a emborracharnos, y a  pervertir nuestro cuerpo. Porque Dios nos está hablando diario por medio del mensaje que tu, estás poniendo en la  mesa cada día. Síguelo haciendo mamá, nos ha servido mucho.  > A través del tiempo recapacitarán y sabrán que Dios está en ellos, en vuestra mamá, porque les está hablando Dios por medio de ella, cada vez que se sientan a comer, y ya están leyendo eso mis mensajes.
Tomen conciencia de todo lo que les he hablado y cuiden a sus pequeños.  Miren si en el momento no entienden, ellos lo van a entender, y les darán las gracias después. Y cuando estén en el Reino de los Cielos,  bendecirán a vuestra madre, y a mi padre, que los corrigió de una forma  tan sencilla, poniendo siempre un mensaje de amor en vuestra mesa cuando comíamos.
Soy Jesús con ustedes, soy el eterno Sacerdote, el Sacerdote Real, y  Divino. Quien he hecho a todo mi pueblo, un pueblo sacerdotal.

Por tu cuenta no podrás hacer algo por ti mismo. Yo te digo  pide y recibe, pero siempre que pidas, hazlo siempre en tu Señor.  Porque los he creado y redimido. En Mi son porque ahora se unifican a Mi, por medio de los Sagrados Sacramentos. Ahora Tú en mi y yo en Ti.  Siempre que me pidan haganlo coherentemente, pídanme mucho y sean perseverantes en pedirme, que Yo Dios, doy a mis hijos todo aquello que necesitan para vivir santamente. Pero muchos de  mis hijos van y malgastan lo que Yo les he dado, se van a las cosas del mundo, cuando han recibido tanto de su Señor. Y me dicen que aquí está lo que les di, que se lo de a otro, y se iran al mundo, porque les llaman.  Y os te digo hijo,  si algo has recibido y tu me dices que no lo quieres.  Yo te respeto, pero en verdad  te digo,  en el último  día te diré,  te acuerdas que Yo te confié mucho y me  dijiste, no lo  quiero. Dirán que no lo dijeron.  Te lo dí, y no quisiste trabajar,  me  lo regresaste. Yo lo tomé y se lo dí alguien que si quería trabajar. Si les digo esto, es como la parábola de la higuera, me espere un año más, a ver si daba fruto, y espere otro año más, cuidé la higuera, pero no quiso darme higos.  Y entonces que estaba haciendo allí esa higuera, Si no daba higos, y ni tan siquiera servía su sombra, porque estaba seca.  Es porque Yo quiero que ustedes que han recibido de Mí, lo pongan en práctica en sus vidas, y para los suyos. Yo no quiero que se pierda ninguno.
Postrados todos, vienen adorarme. Pero muchos de ustedes no vienen en gracia de Dios, pues háganlo,  tanto que les pido, siempre oren y reciban. Quiero verlos siempre en mi Hijo, y quiero ver a mijo en cada uno de ustedes.
Ustedes darán testimonio de que Yo soy el Señor, porque igualmente han recibido de Mí.  Han recibido en abundancia, igualmente Yo los he creado, y son creados por Dios, como hijos de Dios, para Dios. Para que vivan con su Señor eternamente,  en un Reino creado por Dios, y el mismo Dios que les ha venido a redimir, los ha hecho herederos del Reino.
Yo les  recuerdo la parábola donde se habla, y donde es palabra de Dios. Los que han encontrado ese campo donde está  ese tesoro, no lo venderían.
Yo he venido a traerles mi Reino, ustedes dirán, que aun no viven en el Reino, y estan tan necesitados. Porque os quiero, están necesitados, para que me busquen, para y reciban mi Reino.  Si ustedes se dejaran llevar por la  abundancia, se irían al pecado,  al mundo, y a la muerte. Mediten en lo que Yo les estoy hablando,  conviene que dejen todo por Mí, todo.  Si han hecho daño, algo que ha herido a otros, y han dado muerte a su espíritu, aquí estoy me he quedado para darles vida. No quiero un pueblo muerto,  sino un pueblo vivo, un pueblo en Dios.     Pongo mis manos sobre ustedes como mis hijos, y mis ungidos, como el pueblo santo de Dios, como el pueblo redimido. Ustedes dirán que  como serán santos, si los santos están en el cielo. Y Yo te digo, los que están en el Reino de los Cielos, aquí buscaron la santidad. Cómo, con el sacrificio, y el de dejar todo por tu Señor. Si alguien es piedra de tropiezo para ti, aléjate. Primero está la salvación de tu alma, el Salvador te quiere en Él.  Mi Hijo tan querido, en verdad te digo que hombre alguno, no te dará la vida eterna. Solamente Dios tu Señor, quien quiso tomar carne de una Virgen pura, para redimirte y ha pagado por tus  pecados. Es tiempo que te sorprenda la muerte, y te encuentre en pecado mortal, y es tiempo de que te arrepientas. Muchos se arrepienten en el último día, en el último momento.   Yo te quiero santo, en un grado de santidad, en el cual me estés contemplando eternamente.  Muchos dicen en el último día me arrepiento, ciertamente Yo te perdono, pero quieres estar en el último lugar por una eternidad. Yo les digo, vivan una eternidad  conmigo, en un gozo inmenso, y en una alegría eterna. Conviene que dejen todo  por Mí, acaso esas modas,  y los que dicen, se usa el divorcio, y se usa el que me vuelva a casar, el que me una, una y otra vez, con un hombre con una mujer, cuantas veces quiera. No, eso que dicen se usa, es pecado mortal. Y les lleva a la muerte eterna y si se arrepienten, irán al lugar donde no estarán siempre presente con su Señor.  Ciertamente Yo les amo a todos mis hijos, y les doy también alegría, pero no quieren estar en presencia de vuestro Dios. Y que Yo les llame hijos míos, y que estén en esa fiesta en la cual en todo  tiempo están los ángeles, alabando y adorando a su Señor.  Y  vivirán en una alegría infinita, pero hacen del mundo su reino, y esto es pasajero. Yo les digo,  no se imaginan la alegría, y el  gozo inmenso que Yo les tengo reservado conmigo mismo, mi Reino es vuestro.

Siempre digan, hijo se santo. Si se va despedir y se va a su trabajo, quizá ya no regrese, pero tu ya le dijiste, hijo se santo. Señor hazlo santo y Yo les escucho, ustedes me los entregaron y me dijiste que querías que fuera santo. A él le dijiste se santo y crees que Yo voy a dejar que mi hijo se pierda, cuando tu me lo entregaste deseándole sea santo.  Nunca los maldigas, porque la maldición cae también sobre de ti, y caerá sobre muchos. Nunca maldigas ni a tu esposo ni esposa. Ni a tu hijo, ni a tu hija, ni a tus nietos, ni a tus amigos. La maldición cae sobre quien os maldice, y si son los padres, también llevan desgracias a sus hijos. Y muchos de ellos se pierden por la maldición, que los padres hicieron a sus hijos.
Estoy con ustedes, y no porque alguno sea más alto o mas bajito, para Mí,  no deja de ser mi hijo. No porque uno sea moreno y güero, deja de ser mi hijo, Yo los crié a imagen y semejanza mía.  Negritos, blancos, chinos, y africanos, todos son mis hijos.
Todos pueden ser testigos de Dios, y misioneros. Háganlo hablando a su vecino de Mí, diciéndoles cuanto les amo, ya están misionando, a todos  les bendigo.
Mi sangre preciosa es bebida de vida, y Yo la derrame hasta la última gota. Para que ustedes siempre consuman aunque fuera en una sola  gotita, toda mi Preciosísima sangre. Y donde van a tomar de la sangre.  Del cordero, donde se celebra, y donde cada vez se está renovando el gran sacrificio de Cristo Jesús. Para su Padre Celestial, en los altares,  allí está mi Sangre Preciosa, mi sangre tan amada, y para todos es. Soy Cristo Jesús. Toda mi sangre derramada por ustedes, ya solamente queda una reserva, en mi amantísimo corazón. Que pronto va a ser traspasado por la lanza y brotará, al abrir mi amantísimo corazón. Todo mi amor y mi misericordia para ustedes, y para los suyos, y hasta el fin de los tiempos.
Si ustedes supieran cuanto les amo, llorarían de alegría. Muchos de mis hijos no saben que les amo y os dicen,  el Señor me ama.  Pero es cuando pecan, y dicen, el Señor me va a perdonar porque me ama, y siguen pecando. Saben que les amo y que les perdono, pero acaso este será amor para vuestro Dios. Hijos mediten.


 Les amo.

        

Mensaje 7 de Agosto 2012











Muchos solo me mencionan. Pero acaso Yo escucho aquel que me dice, Señor mío y Dios mío, Cuando esta  pecando. Y cuando esta entregado solamente a las cosas de este mundo y su corazón esta solamente lleno  de cosas terrenas. Os necesitan vaciar su corazón,  hacer un esfuerzo y dejar aquello que les estorba, o es piedra de tropiezo para las cosas de su Señor, en las cuales Yo le he hecho un llamado. Y solamente dicen Si. Y otros se retiran y os preguntan.  > Que quieres de mi. Yo vengo a pedirte, primero dame a mi. Si tu quieres que yo te de, dame lo que yo te pido, así Señor te podré servir, si puedo y si quiero también Señor, porque mira que mi querer solamente es para ti. Pero si quieres dame fuerzas para que yo quiera, sino Cómo te voy a servir Señor.  > Y Yo les escucho y siento una tristeza tan grande. Otros me dicen que como me darán si necesitan de mi.  Hijos amados ciertamente  están necesitados de Mi, pero muchas veces me lo piden con altanería, y os me lo piden groseramente. Yo siento mucho dolor en Mi corazón y os digo, Como te voy a dar hijo, si tu no buscas doblegar  tu corazón, ni tu mente. Os si te viera en  la docilidad me dejarías hacer Mi obra en ti, y darte lo que tú me pides. Y asi también en Mi, darías fruto. Pero así Cómo vas a daras. Si me dijeras Señor aquí estoy, que te ayude a tomar la decision. Conozco tu necesidad dime si quiero concederte lo que me pides., porque estas enfermo, y tu corazón esta lleno de tristeza por tu hijo, por tu esposo y por mi nieto, porque andan en el mal camino, y estan enfermos. Os cada uno  tiene necesidad, si Yo viera la humildad en mis hijos, que alegría me daría. Os benditos hijos que os me piden como  el siervecito le pide a su Señor. Yo los levanto, y los traigo a Mi, y  Yo con amor de Padre, con amor de Dios voy limpiando, purificando, y cambiando aun su interior,  su pensar, y su querer. Pero muchos no me lo  permiten y muchos solo quieren ir a escuchar el mensaje de Dios. Y Mejor dicen que leen la Biblia, y que haran ahí, que lo que dicen ya lo saben.  Eso es soberbia, y  muchos de mis hijos se van, leen la Biblia de prisa y no quedo nada en ellos. En seguida dejan la Biblia, salen a la calle y empiezan a vivir ordinariamente en el mundo, y no buscan lo extraordinario. Tan siquiera en salir y decir, voy  hablar de lo que en la Sagrada Biblia ahorita me dijo  Dios por medio de ella. Solamente van, y platican de la comadre, de la novela, y del amigo. Ahí entra Satanás, y esta hablándoles.  > Mira tu comadre es una mujer en la que no debes de confiar. Acuérdate que te invito a la oración, y es una mujer enfadosa.  Solamente invitándote a las cosas que dice que de su Señor. Tú vives en el mundo, vive de lo del mundo y luego ya iras con tu Señor. Tú tienes obligación, mira acabaste de tus quehaceres, y obligaciones, ahora descansa. Vente vamos a ver una novela, mira al ratito vas, te bañas y ya iras a platicar con tu amiga. Después iras, si puedes hablaras con tu esposo y fíjate como viene, muy serio. Por qué será. No vendrá de por ahí con algún amigo el cual le puso en su cabeza contra ti algo. No vendrá de con alguna mujer, o algún lugar que se haya ido a tomar, revísalo.   > Y os puede poner el demonio aun en aquel hombre, algo de lo que él mismo crea y pone en la cabeza, en su cuerpo, y en su ropa. Y el demonio asi busca  la desavenencia.  Porque el hombre y la mujer no se  acercan a su Señor, no quieren las cosas de su Señor, solamente las cosas terrenas, las cosas según la carne. Y ya es tiempo de que cambien, de que maduren ya es tiempo. Cada día que pasa, Qué ofrecieron a vuestro Dios y Señor. Están edificando en el Reino de los cielos, o están edificando aquí en la tierra.  Muchos de mis hijos se van a otro grupo de oración, porque dicen que allá si los sanaran, que vayan y se diviertan. Allá les dicen que no forzosamente tienen que ir a misa, que vayan pero cuando vayan sea con fe, que si  no hay fe en ti, para que te sirve ir a misa. Y Yo les digo, vayan y participen de la santa misa, así están venciendo a Satanás. Asi lo vencen en esa flojera, y en esa indecisión, y así están venciendo a uno y a muchos a la vez. Y saben que, Cuando ustedes vencen un  enemigo de la flojera, vencen al de la indecisión, y os vencen también  aquellos enemigos, los cuales les están poniendo siempre. > Quédate dormido, mira que bonito esta saliendo ahora el sol. Tiempo de que hagas tu  quehacer, después te iras a misa, hay mas tiempo. Mira que bonito esta el día hoy, hoy es un día para que lo aproveches. Anda que te  arreglen, que te peinen, mira anda de visita con tu comadre, acuérdate  que te invito a comprar aquella blusa, y aquel pantalón.  > Siempre el enemigo esta poniendo distracciones, y al vencer un espíritu vencen a muchos, y si van y participan de la santa misa,  aun sin tener fe, y sin tener ganas.   Ya están  venciendo en Cristo. Vayan y participen de la santa misa,  si verdaderamente no pueden, os vayan cuando puedan. El que ama a su Señor,  busca a su Señor y va con su amado a tener una cita de amor, y una entrega de amor. Y si les digo una entrega de amor, es porque  Yo me entrego a ustedes, para que se entreguen a Mi, al ver el sacrificio que están haciendo, un sacrificio de amor  por vuestro Dios y Señor. Pídanme cuando están participando de la Sagrada Eucaristía, y entréguenme aquello que hay en ustedes, y que no viene de Mí. Os acaso ustedes dirán que ya me lo han pedido.  Sí,  Yo te he escuchado, y sabes que. Estoy haciendo Mi obra igual que en ti, en muchos. Yo me espero y digo; Mi hijo me ha pedido y os estoy dando en su suplicas a muchos de los que no están aquí presentes. Están recibiendo por tu medio, si te diera en el momento lo que me pides, quizá en ese mismo momento no lo valorarías. Ni siquiera dirías, Que bueno es el Señor. Muchos os reciben y dicen que recibíeron de su comadre, que oró por ustedes, que los toco y yo sanaron. Que Fueron con el médico y sanaron,  y es muy buen médico. Y  van les llevan regalos, y le llevan clientes también, y  Yo estoy esperando que reconozcan que de Mi les vino salud, de Mi les viene todo bien. Ciertamente tomo medios, pero Yo me quedo ahí contemplando en un rincón como están alabando al medico, y cómo le llevan clientes y regalos, cuando Yo no les merecí  ni siquiera, gracias Señor.  Quiero que den gracias a su Señor y su Dios, y miren en esas gracias  que dan a su Señor y Dios, también está recibiendo la comadre, y el médico. Al dar gracias a su Señor y Dios, y al agradecerme por tomarte como un medio por el cual te di salud, y paz a tu corazón. Pero den gracias a su Señor, y os den gracias también por quien Yo tome como un medio para darles salud. Pero muchos solamente van por el mundo diciendo, Miren que predicador tan bueno vayamos con él, que tiene dones y carismas. Y buscan siempre al hombre, aun al Sacerdote, siempre van buscando  al Sacerdote que  les da salud, y liberación. Y os les digo, ciertamente no es el Sacerdote, es Dios quien os les está dando, Yo soy su Señor.  Miren hijos, si os fueran con su Sacerdote, el que está con ustedes siempre, el que Yo le concedí por voluntad mía que fuera su pastor y guía en Cristo Jesús. Os si ustedes tuvieran fe y dijeran: Voy a mi Sacerdote Dios está en él, Dios va hacer su obra por medio de él. –Por medio de ese Sacerdote Yo hago mi obra  en ustedes, y les doy  salud. Porque ustedes están buscando a su Señor, a su Jesús en ese Sacerdote, y Yo les doy por medio de él. Muchos os están  diciendo que solo van con cierto Sacerdote a recibir. Yo estoy en todos, estoy en cada uno de mis hijos, y por medio de aquel sacerdote, que ustedes en Mi reciban por medio de él, Yo ya  les estoy dando y Yo los libero.  Yo os doy poder  a mis hijos, porque Yo mismo soy el poder él, soy Yo el que los libero por su medio. Porque ellos tienen todo el poder en Cristo para vencer a satanás, y liberarlos a ustedes. Yo soy Dios, y Yo doy por medio de quien Yo deseo. Muchos de mis hijos Sacerdotes viendo la dureza de corazón de los fieles, ellos también se  entristecen, y me preguntan que hacer con Mi pueblo. Porque les hablan y no entienden, una y otra vez de mi y no me aceptan. Muchos de mis hijos Sacerdotes  solo con su Señor gimen y lloran, ustedes no los ven pero ellos se entristecen tanto, al ver la dureza de corazón de su pueblo. Y muchos de los files dicen que ese Sacerdote no les hizo caso, que fueron con él y no les atendió.  Muchos de mis hijos Sacerdotes os son tan difamados, y os tienen tristeza en su corazón. Me piden ayúda para atender a mis hijos.  > En tu Nombre Santísimo yo lo hago todo, pero dales la fe  para que reciban de ti por medio de mi. Mira que muchos te están recibiendo, pero te adoran. Te alaban, y te bendicen Señor. A caso ellos están consientes, aunque yo se los digo, que eres tu el Señor a quien han recibido.  > Os mis hijos ciertamente Yo los he tomado de entre el mundo, los he tomado  para hacer Mi obra por medio de ellos,  ustedes quieren de los Sacerdotes en abundancia según la carne, quieren de ellos, y muchos no saben que Yo soy en ellos quien está dando. Muchos dirán Vamos con el Sacerdote a que me imponga las manos. Y deben decir, Vamos al Sacerdote para que Cristo que esta en el, me imponga las manos por  medio del Sacerdote. Pidan en Cristo, os si aquel  Sacerdote que ven y dicen, Pobre Sacerdote. Ese pobre Sacerdote tiene todo el poder, para salvar en el Nombre de Cristo, a multitudes en ese pobre Sacerdote. Yo soy Dios es ese pobre Sacerdote tibio, Yo soy Dios, y sabes que, Yo te libro de la muerte eterna por medio de él. Y  Por medio de él, Yo te unifico en Mi, y te hago iglesia  mía. Por medio de ese Sacerdote que intercede por ti,  Yo lo escucho, y puedo hacer cosas grandes y maravillosas en ti. Cuando tú ya estas recibiendo de Mí, por medio de él. Os quiero que oren por los Sacerdotes, e intercedan mucho por ellos, y que intercedan mucho por los seminaristas, ellos son mis hijos, mis muy amados para ustedes. Sean Cristo vivo aquí en la tierra, porque  Yo soy en ellos,  estoy haciendo Mi obra en todos. Ora mucho por ellos, y acuérdate que el es hombre como tu, pero también es el ungido, y ha recibido de Mi la unción como Sacerdote. Y él es en Mi y Yo en él. Si les hablo esto es para que  crean. Yo les doy por medio de cada Sacerdote. Ninguno de ellos esta exento de dar vida en el nombre de Cristo, aun por medio de ellos, Yo os libero de la pena temporal en el purgatorio. Por medio de un Sacerdote Yo te puedo perdonar tus pecados mas graves, y ellos dan la absolución a los pecados que has confesado, y de los que te has arrepentido en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Y asi Quedaste limpio, puro, y sano. Si tuvieran fe aquellos que están poseídos, al recibir el perdón de sus pecados, quedarían liberados, pero a muchos les falta  fe. Yo les digo esto para que todos reciban de su Sacerdote, vida. Yo doy vida por medio de ellos, cuando ustedes quieren y aceptan, cuando se arrepienten, y os dicen, Voy a Cristo en mi Sacerdote. Todos mis Sacerdotes,  son en Mí y Yo soy en  cada uno de ellos. ámenlos pues, y respétenlos. Reciban de Mí por medio de ellos, no vayas y digas que  El Sacerdote te dara, te impone las manos. y te libera. No es el Sacerdote, es un medio que Yo tomo, para liberarte. Pero todos son Sacerdotes en Cristo, y Cristo el eterno Sacerdote, en ellos hace su obra. Os también ustedes anímenlos, y díganles el valor tan grande que tienen ellos en Cristo, como Sacerdotes. El Eterno Sacerdote, el único Sacerdote Cristo Jesús, los hace Sacerdotes a todos ellos en él. Yo soy el único, y todos ellos en Mi, para bien de Mi pueblo y todos ustedes  como sacerdotes comunes en Cristo Jesús, para bien de mi mismo pueblo. Unos a otros, y otros para unos. Yo les quiero mucho.

Vivan contentos, no sufran tanto. Os los que están enfermos alégrense y  digan.  > Señor y Dios mi enfermedad en ti.  Tómala en ti, y en tu santísima Pasión tan dolorosa. Para que seas en mí también. Yo te quiero en mi Señor, Tu eres en mi vid, y la vida. Y yo soy en ti la vida que me das, y mi vida en ti no se va a terminar. En mi enfermedad quiero yo desagraviarte Señor,  de mis culpas y pecados, que he cometido atreves de todo el tiempo. Quiero desagraviarte Señor, si tú quieres Señor, borra de mi toda mancha. Yo no quiero ir al purgatorio, y yo sé que tú eres bueno, y hoy por mi enfermedad sé que  me limpias y me purificas. Porque mi enfermedad esta en tu pasión santísima, Señor tómala para muchos si tu quieres.  > Yo en la humildad con la que me lo piden tomo en Mi toda su ofrend, con tanta alegría y amor. Y le doy tanto mérito  que en ultimo día, entran al Reino en Mi, y luego me dicen que son tan pecadores. Y Yo te digo, cállate, no tienes pecado. Acuérdate que me ofrecías tu enfermedad, en Mi Sagrada Pasión tan dolorosa. Y me pediste que Yo te purificara y que te librara de la pena temporal del purgatorio. Yo te escuchaba, tu me lo pediste  y también que le diera mérito a muchos. Pues mira el mérito que Yo le di a tu enfermedad, en Mi fue la de todas estas almas que estaban muy enfermas, e iban a morir en pecado y se arrepintieron. Y fíjate que no se perdieron,  Están  en el purgatorio, vamos para que los veas. Yo soy Dios y soy  Padre, y agradezco tanto el que me ofrezcan en mi mismo amor, sus enfermedades y sufrimientos, y que me  ofrezcan también el dolor de  sus hijos que andan dispersos. Que lo ofrezcan por otros que andan también  en el camino equivocado, como su hijo. Yo soy un Dios de amor, agradecido. Os hago Mi obra en aquellos, y en tu hijo también, cuando me piden solamente por sus hijos. Cuanto deseo que me pidan  también por otros que sufren, y lloran, por aquellos  padres y madres de familia que están sufriendo y llorando. Me gusta que haya una comunidad en Cristo, que ama, una comunidad unida. Me gusta muchos que se amen los unos a los otros. Yo estaba aquí en la tierra como Dios y  hombre, visible para todos. Ni uno de ellos se  iba vacío, solamente aquel que no creía, y endurecía su corazón, y que tenía malas intenciones. Os solamente aquellos en los que había la necesidad de recibir, os decían vamos a recibir. Pero en ellos no había  tan siquiera el que pidieran ayúda y paciencia. Por haber pecado y venir arrepentido ante Mí. Estos hijos son los que reciben, pero aquellos que solamente piden y siguen  con su corazón duro, y cerrado. Que maldicen, blasfeman, critican, y buscan el mal para su hermano, No pueden decir, que recibiran a su Señor. Primero arrepiéntase de su pecado, y os busquen vivir santamente.  Y Yo el Señor Dios daré en Mi Divina Voluntad lo que a ustedes mas les convenga. Mi Paz en ustedes,  soy vuestro Jesús.

Esta es una tarde de fiesta, de encuentro con Dios vivo. Y Dios con su pueblo no le deja. Reciban de Mí. Les he pedido a todos que permanezcan en gracia de Dios, y que vivan en comunión con vuestro Dios. Los quiero a  todos en común-unión conmigo. Yo quiero ser en ustedes, Soy vuestro Señor Jesús, y quiero ser en ustedes, que sean salvos. Benditos hijos aquí estoy ahora con ustedes, y os ciertamente estoy  derramando todo mi amor y misericordia, en cada uno de ustedes. Os arrepiéntase de todo corazón de su pecado. Y os quiero también que os participen y  vivan una vida sacramental.  Muchos  de mis hijos se mofan de los que os son míos y en Mí, y os les dicen, Mojigatos. Ellos que van a misa todos los días, y reciben a  Dios, creen que son los peores. Y saben porque os les dicen eso, Porqué es Satanás quien les está poniendo en su mente y corazón, esas palabras hirientes. Pero las recibo Yo hijos amados, no aquel al que estas ofendiendo. Nunca os dejen el pecado en ustedes. Si pecaste, inmediatamente levántate horrorizado, porque en ti ha entrado la antigua serpiente. En ti está la antigua serpiente cuando has pecado, cuando estas en pecado mortal. Corre inmediatamente a confesarte, que Yo te quiero salvar, y liberar de esa serpiente venenosa. De esa serpiente que en  ese momento mata tu espíritu, y Yo te quiero vivo hijo. Que  importa que  te digan todo lo que quieran decir. Todo eso ofrécelo a tu Señor, ese dolor, esa vergüenza, y esa tristeza. Los estoy tomando como un bautismo blanco, purificación y gloria para ustedes. Que importa que les llamen como quieran, eso es obra de Satanás quien les pone en la mente y en su corazón,  la ofensa para ustedes. Pensando que ustedes van a disminuir, pero no, van aumentar en santidad. Porque no se van a dejar llevar por el que decir del hombre que les ofende. Van a seguir adelante y  los quiero en común unión conmigo, y Yo con ustedes, ustedes en Mi y Yo con ustedes. Me gusta mucho cuando platican conmigo, y dejan un tiempo de dialogo para Mi. Me van a sentir porque Yo quiero estar en ustedes. Ustedes en Mi y Yo en ustedes somos uno, un solo cuerpo. Yo les doy Mi Señorío, y Yo el Señor  de Señores los hago en Mi, señores. Y los hago en Mi, Reyes, y no los reyes de este mundo, sino reyes en el Reino de los cielos. Son profetas, porque son llamados como todo profeta a anunciar y denunciar. Y os ustedes son llamados a llevar el kerigma, y a evangelizar. Y todos son llamados como hijos de  Dios, y herederos del Reino de los cielos, a traer almas.  Yo os traigo almas por medio de ustedes, María Santísima es en Cristo, y Cristo en María  en ustedes. Estamos haciendo nuestra obra cuando nos lo permiten. Son sacerdotes, y todo sacerdote proclama a su Señor delante  de su pueblo, es medianero entre Dios y su pueblo, y ustedes son intercesores por sus hermanos. Yo los escucho y aquí estoy con ustedes, en ustedes. Todos son en Mí, les beso y les traigo a Mi amantísimo corazón, y los envuelvo en Mi amor y misericordia infinita. Y no digas nunca de tu hermano Que es malo. Ora por el, ponte en su lugar, y piensa que tu podrías estar igual. Ora por él como si tu  estuvieras en su lugar, y ora por él para que él sea aquel hombre nuevo, en Cristo Jesús. Deseo tanto este tiempo con ustedes, y os estoy escuchando, y recibiendo. Me están cantando, alabando y adorando, en espíritu y en verdad. Benditos sean.

Dichosos los que se reúnen en torno a su Señor, y a María Santísima, para alabar y bendecir a su Señor. A esto fueron ustedes  enviados, y fueron creados por Dios para os alabar, adorar, bendecir, y glorificar en espíritu y verdad, a su Señor. Ustedes fueron creados para hacer en Dios, y en Dios dar fruto, y después de esta vida  ir al Reino. A gozar eternamente en el Reino prometido para todo aquel que es fiel a su Señor.

Muchos  han recibido mi mensaje, y muchos de mis hijos estaban en el  camino equivocado. Y entro una lucecita al leer mi mensaje y os dijeron que estaban equivocados.  Que el lugar no era. Que no es una religión y no es la Mia. Van a ver que hay allá, por encontar verdad, se dan cuenta que estan equivocados y andan en el camino equivocado. No se quieren perder, vienen y se asoman a ver que hay en la Santa Iglesia Católica. Y os hijos, esto está pasando en muchos  lugares donde han escuchado Mi mensaje. Lejos de aquí, os han traspasado las fronteras. Pero Yo les digo, son mensajes de evangelización, de vida, y es palabra de Dios, es Luz. Yo soy Jesús y soy la Palabra, y por medio de ustedes estoy llegando  a muchos corazones, y a muchos de mis hijos. Aun algunos Sacerdotes con curiosidad han leído mis mensajes y os se preguntan Que será y si vendrá de Dios. Y  enseguida lo ponen en discernimiento y os dicen, Que grande es el Señor, Como toma hasta de los últimos de sus hijos, para hacerse conocer. Y dan gloria y gracias a Dios, y algunos oran por ustedes para que sigan adelante en Cristo, con Cristo y para Cristo. Ustedes que  dicen que hacen si estan en su casa. Y Yo te digo; ora mucho, intercede mucho, ofrece tu sacrificio y tu cansancio de tu quehacer. Y os digan que lo tóme  como un medio para que Yo Dios todopoderoso haga Mi obra por medio de él, en aquellos que  están evangelizando, y en aquellos misioneros que llevan mas allá de las fronteras. Oren los unos por los otros, intercedan y trabajen con sus vecinos. Lleva Mi mensaje a tu vecino, y os llévalo a tu comunidad, háblales de Mí. Tú que dices, Señor pero yo no sé, yo que les voy a decir. Yo aquí te estoy instruyendo, Yo me estoy dando a conocer a ti, para que me lleves a los que no me conocen. Os mencionaría a todos, mas les digo, que sus nombres estas escritos en Mi, y en Mi amantísimo corazón. Os vayan y lleven en el Nombre de  Cristo y en Cristo, y os volverán llenos de alegría diciendo.  > Señor yo,  el más ultimo de tus siervos, vengo a decirte que aquí estoy Señor, vengo de una jornada, sí. Pero Señor solamente fui porque  eres bueno, y tú quisiste llevarme. Aquí esta mi cansancio.  > Díganlo en el secreto, no lo digan delante de unos y otros, porque ya estarían recibiendo aquí su pago. Y Yo no quiero eso, no edifiquen aquí. Edifiquen en el Reino de los cielos, y si están cansados, ofrezcan su cansancio en Mi, lo tomo y le doy el merito que tú quieras. Vayan a trabajar conmigo, y yo contigo. Soy el Señor de la obra, y solamente denme gracias  porque les permito el regalo de ir en Mi, para que haga Mí obra  por medio de ustedes. Les hablo a todos ustedes, son  mis hijos, mis muy amados, unifíquense y trabajen. Laboren, y os en la tarde, y al anochecer recibirán el salario, el Reino de los cielos. Busquen el primer lugar, busquen siempre dar gloria a vuestro Dios y Señor, en todo momento. Y os cual es el  primer lugar para ustedes, que no sea el que sean exaltados, y les digan, Que trabajador y santo. Que iran para que les haga oración. Que Le diran que es  muy bueno para que se anime. No hijos amados, esto no viene de Mí. Cuando os reciban alguno de mi, y  le hagan oración díganle, Tú y yo en Cristo. Tú le vas  hablar  al Señor porque él es tu Dios, y mi Dios. Y el mismo merito que  Dios le da a mi obra, le da a la tuya. Oremos juntos, hablémosle. Asi quedaran como aquel que busca  que su hermano, que pide oración, sea él el que ore a su Señor, y el que hable. Aunque estén orando en el secreto pidiendo a Dios por ellos, pero ustedes ya estarán diciéndole: Dirígete a tu Señor, él te ama. –Ustedes ya estarán orando por el en el secreto, háblenme, Yo les escucho.  Me gusta mucho que sean humildes, nobles, y obedientes. No dejen entrar  la soberbia en ustedes. Benditos sean, os les digo, todos ustedes han recibido de Mi, y  os en lo que han recibido, pueden llevar. Y os lleven  a los demás en Cristo, en el nombre de Cristo, y os con María Santísima.

Soy Yavhé vuestro Dios, son mis hijos, y os a todos  los quiero en Mi Hijo muy amado Jesucristo. Como iglesia peregrina, y santa, en Cristo. Yo no quiero que se dispersen, quiero que vivan solamente para  su Señor. Aun en tiempo en el cual se bañen. Dedícame tu baño, ofrécemelo. Ofrece tu  descanso, y aun tu respirar. Tú que vas a la tienda y dices, que hoy no puedes orar, que iras a la tienda y te queda tan lejos. Invítame a ir contigo, y Yo quiero que me vayas hablando, que dialogues conmigo. Y verán que evitarán mucho pecado a través del camino que van a recorrer. Y vamos a regresar, tú conmigo y Yo contigo. Y tu alegría va hacer grande, y tú paz es grande, porque Yo te doy mi paz. Os quiero que vivan en Cristo Mi Hijo muy amado. Que sean Cristos vivos aquí en la tierra. Quiero que estén en obediencia  plena a mis mandamientos, para ustedes que son vida, mis mandatos divinos, la Ley de Dios. Ámense hijos amados. Os les he dicho hace un momento que vivan una vida sacramental, quiero que me obedezcan, soy Yavhé vuestro Dios. Ayúdense y Bendíganse los unos a los otros. Y os pidan todo en el Nombre de Cristo, y os den en el Nombre de Cristo, y os reciban en el Nombre de Cristo. Y hablen en el Nombre de Cristo, vayan, y  María Santísima como vuestra Madre les acompaña siempre. Como una madre va con  sus hijos, siempre les cuida, y les espera un. Madre mía, ayúdame.  Les amo mucho con amor de Dios, Mi amor es eterno, e infinito. Os Mi amor es siempre la vida para ustedes. La vida es amor, y ustedes que  aman tienen vida. Ustedes que aman, son en Cristo, y todos los  que son en Cristo, son en Mi.  Y todos los míos poseen el Espíritu Santo, y el espíritu de Yahvé. El Espíritu  Santo que brota del corazón dulcísimo de Mi Hijo, es tuyo. Mi Espíritu es tuyo, recíbelo y ámalo. Sé motivo de alegría, y de contento, háblale, báilale, aun estando solo en tu cuarto, él esta en ti. Quien contra ti. Que espíritu puede entrar en ti, si está el Espíritu Santo. Si tú lo adoras, lo amas, y le pides mucho que No te deje. Tus enemigos se cuentan por millares pero Yo te basto Hijo.
Hijos el Reino  esta aquí, esta con ustedes, es Cristo. El está en el Reino, Dios  está con ustedes, y los que están en Cristo, ya son en el Reino de los cielos. Porque el  mismo Reino vienen a ustedes, y les hace uno en El. Y dan testimonio de lo que ya ven en Cristo en el Reino. Para ustedes es un gran misterio, el Espíritu Santo en ustedes les hace presentes ya en el Reino. Y dan testimonio de lo que ven según el espíritu, y os su carne ve, tiene luz en sus ojos, y esa luz muy pronto se va  apagar. Pero la luz del espíritu nunca, su espíritu tiene sentidos. Por eso les digo que aunque ven, pero están  ciegos, aunque oyen, pero están sordos, porque el espíritu no escucha. Y han dejado entrar el pecado, la miseria, y la oscuridad. Por eso es que les digo que aunque tienen voz, y aunque hablan están mudos, y aunque piensan, su mente esta nublada, y su corazón esta duro. Todos ustedes que me están escuchando, saben la terrible noticia que les estoy dando. Para muchos de mis hijos, los cuales no quieren dejar el pecado, y no quieren aceptar a Cristo en sus vidas.  No quieren ser en Cristo, son los que están sordos, mudos, y ciegos, son los que están duros de corazón. Orad por ellos, y oren  por ustedes, e intercedan por todo el genero humano.

Como Mi grupo de oración, como mis hijos, y como mis muy amados lean. Y os busquen siempre en esta lectura, lectura de santos, y vidas ejemplares. Préstense los unos a los otros estas lecturas, busquen y pidan siempre al Espíritu Santo. Pidan siempre ayúda para darme gloria. Como ese santo que esta conmigo y me da gloria Señor.



 Les amo.