domingo, 13 de junio de 2010

MENSAJE 28 DE MAYO DEL 2010

MENSAJE 28 DE MAYO DEL 2010

Vengo a cada uno de ustedes, les saludo y les beso, vengo a tocar a las puertas de vuestro corazón, pidiéndoles que me dejen entrar, quiero quedarme en cada uno de ustedes, eviten el pecado, pues el pecado es muerte, aquel que en verdad se quiere, evita la muerte en su interior, le cierra la entrada a sus enemigos, permanezcan en oración, permanezcan vigilantes, ustedes son hijos de la luz, la luz esta en ustedes, permanezcan en la luz, bendito y bienaventurado todo aquel que permanece en la luz, bendito sea todo aquel mi hijo que permanece alerta. Yo soy el Señor, la Luz, vuestra fuerza, Yo fortalezco vuestro pensamiento, vuestro corazón, Yo doy ideas nuevas, ideas santas, en verdad les digo que las tinieblas están al acecho, benditos sean todos mis hijos muy amados que escuchan mi voz y de las tinieblas vienen a la luz, les amo a todos hijos, los bendigo, reciban bendiciones.

Mis hijos muy amados, espero la entrega de cada uno de ustedes, pongan su mente en el Señor que les dio la vida, “Padre, gloriémonos de nuestros hijos que hoy dejaron todo y vinieron con nosotros, démosles sanidad Padre, dichosos aquellos mis hijos en ese abandono a nosotros, pues si no hay un abandono al Señor vuestro Dios, pues en verdad les digo que si ustedes no se dejan llevar, serian cual barco a la deriva, que en embravecidas aguas sucumbirían y quedarían convertidos en escombros, en aquellos lugares donde llegue el agua, más esta agua no será pura, sino contaminación, de esa agua que destruye, pues en verdad les digo que hay lugares pantanosos, donde van todos aquellos que os rechazan a su Señor y Dios que es agua viva, rechazan la vida y van a la muerte.

Benditos mis muy amados, vuestro refugio seguro son mis Santísimas Llagas, les fortalezco en el peregrinar de este mundo, para que ustedes en Mi permanezcan de pie, quiero que ustedes se abandonen a Mi en este peregrinar diario, quiero llevar vuestra cruz de cada día, esa cruz que lleva cada uno de mis hijos.

Estoy dolido, el hombre me ha flagelado, permito que el mismo hombre me flagele, por la misma flagelación Yo estoy pagando su deuda, cada uno de mis hijos me da una bofetada, me escupe, me traspasa mi doliente cabeza con las espinas, que pocos son mis hijos que están dispuestos a dejarlo todo y seguirme con su cruz de cada día, al cual Yo les doy mérito, pues muchos de mis hijos cada día están renegando, cada momento maldicen, vociferan palabras altisonantes, en su peregrinar traman, planean hacer toda clase de males, pobrecitos hijos míos, muchos de éstos no me conocen, pero hay muchos que si me conocen y son los que mas dolor me causan, pues deliberadamente y con toda intención vienen y me escupen, arrancan mis cabellos, causan esas heridas en mi Divinidad, les hablo de mis malos servidores, aquellos que dicen estar conmigo y que por ese mal testimonio que dan, están arrebatando muchas vidas, pues son aquellos ladrones que están robando la fe, están desparramando, están desviando almas y muchos de éstos son los que dicen estar en mi Iglesia, son los que se pavonean en los atrios de mi casa, que gran dolor siento por todos aquellos mis hijos que les he confiado mis bienes Divinos que son mis administradores, los administradores del Reino aquí en la tierra, mis hijos muy amados Sacerdotes, Obispos, todos aquellos mis hijos muy amados que son un puente entre el pueblo de Dios y Dios mismo, muchos de ellos son esos puentes que se están desmoronando y todas aquellas almas que van subiendo, van cayendo al abismo, oren e intercedan y ofrezcan adoración y meditación a mi Sagrada Pasión tan dolorosa, el Santo Rosario por todos mis hijos que dan mal testimonio, por todos estos mis hijos que están siendo unos malos administradores, más les digo que por medio del Sacramento del Sacerdocio, a éstos mis hijos amados les he dado poder y por medio de ellos Yo perdono sus pecados y por medio de ellos Yo hago la substanciación del pan y del vino, oren mucho mis hijos muy amados, porque por medio de estos mis hijos Sacerdotes que tanto amo, Yo termino mi obra salvífica en mi pueblo amado.

Benditos sean todos los que son mis testigos, benditos sean mis hijos amados que por amor y obediencia al Señor vuestro Dios y por amor a vuestros hermanos son amor, son misericordia y están testificando de vuestro Dios que los ama y de que ustedes mis hijos me aman, vayan y testifiquen de Mi, lleven mi Evangelio a los que no me conocen, ustedes son luz, son agua, son fuego, porque el Señor Todopoderoso esta en ustedes, permanezcan en unión conmigo, Yo estoy en comunión con ustedes. Les amo.

Por mis Sagradas heridas, las vuestras son sanadas, por mi sufrimiento Yo los consuelo, Yo sano las heridas de mis muy amados y por mi muerte Yo les he dado vida, Yo he vencido la muerte y la oscuridad, Yo permanezco en todos aquellos que viven santamente, aquellos que aman mi Ley Divina, les hablo de los mandamientos que Yo mismo les he traído, Yo soy el Señor de la vida, en verdad les digo que sus cuerpos resucitarán y resucitarán en Mi mismo, Yo les he prometido la resurrección de la carne y mi palabra es palabra de vida eterna, todo pasará , pero mi palabra no pasará. A ninguno he venido a condenar ¿un padre condenaría a sus hijos? Aún en esos momentos de pecado, Yo me hago presente con mis hijos y les digo arrepiéntete hijo, Yo no quiero que mueras, sino que vivas, arrepiéntete de tu pecado y en Mi tendrás vida y vida en abundancia, más Yo respeto a mis hijos, en verdad Yo les digo que Yo les permito tener lucidez en su mente, solamente se perderá aquel que no quiera aceptar la salvación YO SOY EL SEÑOR QUIEN LES HABLA, benditos hijitos míos, les amo.

Quiero que estén alegres, contentos, quiero ser Yo tu alegría, quiero ser Yo tu contento, derramo todo mi amor toda mi misericordia en cada uno de ustedes, benditos hijos míos, les amo, Oh si ustedes supieran cuanto les amo, vengo y les beso en la frente, beso sus mejillas, beso su corazoncito, les beso mis hijos, les abrazo y les traigo a Mi, benditos hijos.

Habla Nuestro Padre Yaveh:

Estoy enamorado de ustedes y un enamorado cuando es correspondido su amor, es grande la felicidad, más cuando el enamorado es ofendido, cuando aquel al que ama le da la espalda, en verdad les digo que corren lágrimas por mis mejillas. Vengo a abrazarlos a cada uno de ustedes, SOY EL ALTÍSIMO, EL TODOPODEROSO, SOY YAHVÉ VUESTRO PADRE, benditos hijos míos, adoradores de la Preciosísima sangre, de las Santísimas Llagas, benditos sean mis hijos que os adoran estas Llagas Divinas, esta sangre Divina, es el precio de vuestra redención, adoren el dolor infinito de mi amado Hijo, sean adoradores y meditadores y en verdad les digo que Yo les concedo cada día purificación, renovación en ustedes, les daré horror al pecado mis hijos muy amados, ustedes irán creciendo en santidad y virtud, les daré hambre de Mi, les daré hambre de María Santísima, les preservaré de la pena del Purgatorio, les concederé conversión de sus familias, les concederé mi paz, les fortaleceré en su caminar de cada día, les concederé la luz en ustedes, les concederé la fortaleza para rechazar todo pecado.

Vengo a pedirles a todos ustedes que permanezcan en mi gracia, les conviene dejarlo todo por Mi, dejen todo aquello que sea pecado, que sea muerte en ustedes, quiero que mi Hijo muy amado Cristo Jesús sea en ustedes y ustedes en Cristo Jesús, y mi Hijo muy amado Jesús en Mi. Yo he enviado mi Espíritu a ustedes, mi Iglesia es Santa porque Yo la santifico, el Santificador esta con ustedes, en mi Espíritu Santo, el Padre y el Hijo con ustedes, les amo benditos hijos, les amo.

Yo vengo hasta ustedes y les abrazo a cada uno de ustedes, y en Cristo mi Hijo muy amado les traigo a cada uno de ustedes, dichosos mis hijos en los cuales permanece el Espíritu Santo, ahora son peregrinos, pero alégrense porque pronto terminará su peregrinar, ustedes se alegran por los árboles, el agua, tantos animales hermosos, se alegran de sentir el aire que respiran, se glorían mis hijos muy amados del resplandeciente sol, de la luna que les alumbra, de la tierra en la cual peregrinan, pues todo esto es pequeñito, muy pequeñito a comparación de la alegría que sentirán en el Reino de los Cielos y verán toda mi creación, esa Creación Divina que hay en el Reino de los Cielos. Ahora estoy aquí con ustedes, Yo el Todopoderoso, el que he creado el Universo, el que he creado la tierra y todo cuanto existe, estoy aquí con ustedes, Yo que he creado mi Reino, todos mis ángeles, santos, toda mi Corte Celestial y saben mis hijos amados que Yo los unifico a ellos. Cuanto deseo hablar con ustedes, cuanto deseo tener un diálogo con ustedes de viva voz, para muchos esta velado todo esto, ellos me hacen un Dios lejano, muchos dicen que no les escucho, que no les veo, muchos de mis hijos no creen en Mi, muchos de mis hijos ellos mismos se hacen llamar dioses. Muchos más quieren disponer de mis hijos sometiéndolos, estos hijos que aunque están llenos de sabiduría de este mundo, son pobres e ignorantes, de que les servirá su reinado en este mundo, si ellos no han abierto su corazón a mi Evangelio. Algunos mas predican mi Evangelio, pero según el pensamiento del hombre, no en el Espíritu Santo, así mis hijos muy amados desviando muchas almas y llevándolos a esa ignorancia tan terrible.

Yo soy el Señor de la obra y todos ustedes mis hijos amados, son los medios que Yo he tomado, benditos sean por abandonarse a Mi y darme su voluntad y sus fuerzas, sin que ustedes se den cuenta, en verdad les digo que por medio de ustedes que colaboran en esta obra que Yo mismo he comenzado, muchos de mis hijos han regresado de la oscuridad a la luz, muchas almas que estaban perdidas escucharon mi voz por medio de ustedes y ellos regresaron, eran ovejitas descarriadas y volvieron al redil.

Yo soy la palabras y he venido a tocar a las puertas de cada uno de ustedes, hay hombres que no buscan las cosas Divinas, pues se sienten autosuficientes, y van por el mundo llenos de orgullo, su soberbia es grande, más yo Padre Providentísimo siempre estoy llamándoles, siempre estoy buscándoles, más tengo muchos amigos que me han abierto su corazón y estos mis amigos dicen: Señor aquí estoy envíame a mi, Aquellos que inspirados por el Espíritu Santo y con esos deseos de llevar la luz donde hay oscuridad, en ese momento el Espíritu Santo, al recibir la voluntad de aquellos mis hijos, el Espíritu Santo en la voluntad divina les hace sentir, ver, escuchar, rompe ataduras y estos mis hijos muy amados van y llevan la buena nueva, así el Altísimo, el Todopoderoso dándoles hambre y sed del mismo, estos mis hijos muy amados, fortalecidos, instruidos y guiados por el Santo Espíritu en el mismo Espíritu Santo y tomándolos como medio, van y dan vida, son todos aquellos buenos servidores que se han abandonado a Mi entregándome su voluntad, todo servidor de Dios, siempre se abandona a mi Madre muy amada María Santísima, saben que María Santísima les asistirá, les protegerá, les guiará y alejará a todos aquellos con intenciones de destruirles, de robarles, de arrebatarles, de hacerles caer, saben que en María Santísima ellos no serán vencidos, los perseguidos saben que en Jesús y María seguirán de pie.

Les amo.

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