A cada uno de ustedes les saludo, que alegría de verlos a todos unidos mis muy amados, con gran alegría espero, estos días de entrega de mis hijos muy amados, muchos son invitados, pero muchos tienen diferentes cosas que hacer, si no es necesario lo que haces, ven deja todo y ven conmigo, YO SOY JESÚS TU SEÑOR, se la intención de cada uno de ustedes, se la necesidad de cada uno, dichosos mis hijos que son perseverantes, en aquello que piden a su Señor y Dios, dichosos los que son perseverantes en la oración, en las obras de misericordia, dichosos mis hijos muy amados que cada día quieren dar fruto a su Señor y Dios. Fruto bueno y dulce., son todas aquellas almas enamoradas de su Señor y Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, en fin esta es una cita de amor que nos hemos dado nosotros y ustedes, Padre, Hijo y Espíritu Santo, todos ustedes unidos con mi Madre muy amada María Santísima, ella esta intercediendo por ustedes, benditos hijos les amo a todos, les amo.
Benditos sean mis hijos, todos aquellos que vienen revestidos de gala, con vestidura blanca y resplandeciente, todos aquellos que vienen revestidos de gracia divina, aquellos mis hijos que con fe reciben los Sacramentos, que es mi amado Hijo Jesús, aquel que tiene malas intenciones en verdad le digo que es ese judas que viene y me da ese beso de traición, más en verdad les digo que el que hace mal, su conciencia no le dejará tranquilo, pues el mismo recibirá su castigo interiormente.
Dichosa mi muy amada a la que encuentre despierta, que me esta esperando y me recibe en su lecho y con gran alegría se levanta y grita, ya llego el novio, ya llego el novio y mi muy amada cual castañuela hermosa me recibe, pero no se queda ella sola con esta alegría, va y me lleva con todos sus vecinos, va y me lleva con todos sus amigos, va y me lleva con todos sus hijos, va y me lleva como luz hermosa y alumbra a todos, porque a mi muy amada la encontré despierta, vengo a buscar a mi muy amada en cada uno de ustedes, una mente despierta, preparada para recibir a su Señor, Yo entro por la mente de mis hijos muy amados, llego al corazón y como luz divina alumbro todo su ser ¿Quién de ustedes escondería la luz y dejaría a sus familias en tinieblas? sabiendo que sus muy amados en esa oscuridad tropezarían, caerían, se lastimarían y morirían, Yo soy la Palabra, dichosos los que Yo encuntré despiertos, dichosos los que ya me estan esperando, dichosos mis hijos muy amados que con gran alegría me han recibido y su alegría es tan grande que quieren que todos aquellos me conozcan y me reciban, he venido a unificarlos a todos en Mi y he venido a quedarme en cada uno de ustedes, benditos hijos les amo, Yo soy Cristo Jesús.
Mi pueblo se levanta y alaba a su Señor, de día y de noche y en este amor al Señor su Dios, honra, alaba, bendice a tan excelsa Madre, María Santísima, benditos hijos míos, aquel que dice que me sigue, aquel que dice que me ama, pero que no acepta a mi Madre amada en su corazón, en verdad les digo que su amor es a medias, es tibio y Yo no quiero un amor tibio, lo quiero caliente, llenos de Espíritu Santo, aquel que esta lleno de Espíritu Santo, ama a mi Madre Santísima, aquel que no ama a mi Madre Santísima, en verdad les digo, no ha recibido Espíritu Santo. Yo no vine a condenar a ninguno de mis hijos, más les digo que hay de grados a grados de santidad, de lugares a lugares en el Reino de los Cielos, aquellos que sabiendo quien es mi Madre y la rechazan, me están rechazando a Mi, pues siento un gran dolor en mi corazón y en todo mi ser en aquellos que desprecian a mi Madre a la que Yo tanto amo, benditos hijos, dispongan su corazón, dispongan su mente, dispongan sus sentidos todos a la escucha de mi palabra.
Les amo.
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