Mensaje del 18 de Junio 2010

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Aunque pecadores son,  Soy un Padre Providentísimo, vengo con cada uno de mis hijos y Yo mismo les pido arrepiéntanse de su pecado, no quiero que mis hijos se queden caídos, dichoso aquel que se arrepiente delante de su Señor de su pecado, de su maldad, dichoso aquel mi hijo muy amado que se abandona a mi infinito amor y  misericordia, dichoso aquel mi hijo muy amado, que presuroso viene a su amado Redentor Jesucristo, sabiendo que por amor ha saldado la cuenta de cada uno de sus hijos, el Señor que te ama ha saldado tu cuenta, arrepiéntete de tu pecado, todo hijo de dios esta en obediencia con la Santa Iglesia Católica y es mi Divina voluntad que mis hijos con fe vengan y se acerquen a mis hijos muy amados Sacerdotes y con fe reciban por medio de ellos la absolución de sus pecados, Yo soy el Señor que les lava con su Preciosísima sangre, SOY JESUCRISTO EL SEÑOR, les amo a todos, benditos sean.

Hijos muy amados, con fe entréguenme todo lo que hay en ustedes, las intenciones que hay en cada uno, venimos a ustedes los Dulces Corazones que tanto os amamos de JESUS Y DE MARÍA.

Benditos mis hijos muy amados, escucharon mi llamado y vinieron presurosos, cuanto deseaba este encuentro con ustedes ¿ustedes también desean este encuentro conmigo? Tengan fe Yo estoy aquí con ustedes, vengo con cada uno de ustedes, les beso, quiero que se sientan muy amados por el Señor Todopoderoso que les ha dado la vida, mi Hijo muy amadísimo Jesús, ya ha saldado vuestra cuenta, alégrate pueblo santo de Dios, en Cristo mi hijo muy amado, eres santo pueblo mío, vengo a cada uno de ustedes, entrégame todo aquello que hay dentro de ti y que no te deja ser feliz, si has pecado, arrepiéntete de tu pecado, levántate y ven, pues te tengo una buena nueva que mi Hijo muy amado Cristo Jesús, ya la ha saldado, no peques deliberadamente, pues muchos de mis hijos dicen, el Señor luego me perdona, abofeteas a tu Señor, le escupes, me ofendes y dices, luego el Señor me perdona, pues en verdad les digo que en estos mis hijos no hay amor, no hay sinceridad, ni tan siquiera un arrepentimiento y un deseo de conversión, no peques deliberadamente, más si tropiezas y caes, arrepiéntete de tu pecado, les amo a todos, benditos sean hijos, les amo.

Todos aquellos que hay recibido daño de brujería, satanismo, les tengo una buena nueva Yo mismo soy el antídoto a todo mal, dichoso el que es perseverante en adoración y meditación a mi Sagrada Pasión tan dolorosa, benditos sean todos aquellos mis hijos que son adoradores de mis Santísimas Llagas, dichosos mis hijos que las ofrecen por aquellos mis hijos que han recibido daño, en verdad les digo que ellos irán sanando o sanarán en el momento.   Adoren la Sagrada Pasión de mi amado Hijo, adoren sus lágrimas, mediten en su Sagrada Pasión tan dolorosa con amor, en verdad les digo que ningún enemigo y ningún mal pueden ser perseverante en ustedes, si ustedes son adoradores de la Sagrada Pasión de mi amado Hijo, todo lo que hagan, háganlo por amor y ámense los unos a los otros, quiero que con sinceridad me ofrezcan su ofrenda, reconociéndose enfermos del alma, del Espíritu, es un error de aquellos que dicen, yo no tengo culpa, tengan mucho cuidado, porque esto viene de satanás, el justo peca 7 veces y en verdad les digo que no hay enemigo pequeño, todo enemigo trae muerte, destrucción en ustedes, en su interior y si le dejan, en sus familias, benditos hijos, les amo.

Es una obra de misericordia el que ustedes oren e intercedan por todos los pobres pecadores, por todas las almas, por todas las almas que se han abandonado al satanismo, a la prostitución al asesinato, al aborto, la eutanasia que es un asesinato, todos aquellos que están cometiendo crímenes, prostituyendo a mis pequeños, aquellos que venden droga,  y que por medio de ellos satanás esta perdiendo muchas almas, en fin oren y ofrezcan esta ofrenda por todas las necesidades de todos vuestros hermanos, pues todos son mis hijos y cada uno de ellos Yo lo amo y me duele mucho, sean misericordiosos, como vuestro Dios es misericordioso, ámense los unos a los otros, benditos hijos les amo.

En verdad te digo que tu alegría será hoy siempre grande, benditos sean todos mis hijos que con fe se han reunido en mi nombre Santísimo, lo que en esta visión os permití que les envuelvo en esta luz, Yo soy la luz y Yo les tomo en Mi, y les traigo a Mi y les refugio en Mi, permanezcan en la luz, les amo, les amo.

Pongan en práctica la intención que tienen, pues les digo que estas intenciones vienen de Mi, cuanto deseo tener este diálogo con mis muy amados, después de rezar el Santo Rosario de mi Madre muy amada, más Yo les digo, me glorío en hablar con ustedes, decirles cuanto les amo y que ustedes me escuchen y reciben con fe de Mi, lo que Yo les estoy dando, les amo a todos, les amo.

Lo que ves que vengo y pongo en cada uno de ustedes, es la soberanía que Yo les he dado, mi Madre muy amada María Santísima, me pide que mis muy amados hijos lleven esta corona.  

“Mira que hermosos son Hijo, con fe vienen abandonarse en nosotros, a refugiarse en nosotros y en Ti Hijo amado, son reyes, son profetas y son sacerdotes, en mi Hijo muy amado ustedes son soberanos, Yo Soy la Señora del Cielo, la Reina, pues he sido coronada por la Santísima Trinidad y ustedes son mis hijos muy amados y ustedes reinan en los Dulces Corazones que tanto os aman Jesús y María”

Sigan en esa obra de misericordia mis hijos muy amados y sean misericordiosos, misericordia quiero mis hijos muy amados, los misericordiosos obtendrán misericordia, el que da de comer al que tiene hambre, nunca tendrá hambre, el que da de beber, nunca tendrá sed, su alegría será grande, el que viste al desnudo, Yo lo revisto de gracia, aquel que cobija al que tiene frío, Yo lo cobijo y lo libro de la muerte eterna, sean misericordiosos, siempre practiquen la misericordia y el amor, los unos a los otros, no den lo que les sobre mis hijos muy amados, si no den aún aquello que ustedes tanto quieren, dichosos mis hijos muy amados que con amor ofrecen,  quizás tuviste ganas de un refresco y dices, esto es para mi hermano que tiene hambre, os pongo este ejemplo, no estoy en contra de que ustedes mis hijos amados coman aquello que tanto les gusta, pero les digo también un sacrificio para aquellos que no tienen aquello que ustedes comen, les amo.

Durante el rezo y meditación del Santo Rosario:

Mediten tan siquiera un momento, quiero que cada uno de ustedes me acompañe, estoy triste, lleno de dolor, derramo lágrimas, ya sufro aquí toda mi Sagrada Pasión tan dolorosa, en un momento la estoy sufriendo, contemplo a toda la humanidad, desde los primeros, Adán y Eva, hasta los de este momento que se encuentran ustedes y la humanidad, contemplo a todos los pobres pecadores y gimo y lloro por todas las almas que están muriendo en pecado mortal, pues son mis hijos a los que amo tanto, mediten un momento.

Mediten tan siquiera un momento, estoy siendo flagelado, los hombres que me flagelan son hombres corpulentos, hombres acostumbrados a la guerra, se turnan unos a los otros, para ellos es un triunfo, cada trozo de mi Preciosísima carne que me arrancan de mis Santísimos huesos, gritan como bestias, rugen como animales, cada vez que arrancan un trozo de mi carne Preciosísima, ven mi sangre derramar, cual bestias sedientas de sangre, se burlan, Yo los contemplo lleno de ternura y pienso: ¿si supieran a quien están golpeando? ¿si supieran a quien están destrozando? ¿si supieran a quien están ofendiendo?  Mas en ellos hay mucha ceguera, muchos de ellos se arrepintieron de su pecado, más muchos se obstinaron en seguir en su pecado, mediten, les amo.

Ofrezcan a mi Padre Celestial, esta mi primera caída , aunque están ofreciendo a mi Padre Celestial esta oración, esta meditación, esta adoración, quiero que ofrezcan cada una de mis Sagradas caídas, cada paso que doy, por todos aquellos mis hijos que están desviados del camino, para que vuelvan sus pasos a Mi, ofrézcanlo por ustedes mismos, por sus familias, por sus comunidades, por sus sacerdotes.

Quieren caer mis hijos muy amados, con sus familias, pues conmigo caerán, pero caerán  ustedes en el orgullo, caerán y ese orgullo y esa soberbia quedara allí mismo y así toda clase de espíritus que a cada uno de ustedes les quiera dominar, quizás el de ira, ustedes en Mi se levantarán, más les digo todos esos espíritus de mal quedaran caídos.

¿Están dispuestos a dejarlo todo por Mi? ¿a morir al pecado sus pasiones y a no dar prioridad a su carne? En verdad les digo que en este momento les levanto, les hablo de una conversión, de su propia conversión.

Yo vengo a quedarme con cada uno de ustedes, vengo y toco fuerte a las puertas de su corazón, pidiéndoles ábranme la puerta, les amo.

Muchos de mis hijos dicen, yo no merezco, eso es para los buenos, el que sirvan al Señor Dios, si así piensas nunca vas a servir a tu Señor y Dios, si has caído en el pecado, arrepiéntete de todo corazón y ven, Yo quiero una preparación que recibas por Mi, de Mi, por medio de aquellos a los que Yo he tomado como medios para levantarte e instruirte, aquí estoy con ustedes pequeños míos, en verdad les digo que si vengo a buscar un justo, no lo encontraré, benditos sean ustedes mis hijos amados que se esfuerzan y vigilantes están para no caer en el pecado que es muerte.

Benditos sean aquellos que adoran mis Santísimas Llagas, que ofrecen adoración a mi Preciosísima sangre, aunque ya se los dije hace un momento, se los vuelvo a decir, sean propagadores del rosario de mi Preciosísima sangre, del rosario de mis Santísimas Llagas, propaguen pues mis hijos amados la devoción en adoración y meditación a mi Sagrada Pasión tan dolorosa, una promesa les hago, quien lo haga no se perderá ni él, ni los suyos, porque Yo doy un mérito grande a mis propagadores de mis Santísimas Llagas, de mi Preciosísima sangre,  benditos hijos adoradores de mi Sagrada pasión tan dolorosa, reciban recompensa, esta recompensa no es de este mundo, ni cosas de este mundo, sino les digo, les doy mi paz, les iré preparando, pues tengo planes para ustedes.

VISIÓN.- veo a San Judas Tadeo, veo la puerta de un templo y vi, que abrió la puerta y dice que entremos rápido.

Entren, la ira del Señor han encendido y el Señor Todopoderoso esta muy molesto, es tiempo de que ofrezcan desagravio, ayuno y penitencia, oración y visita a Jesús Sacramentado, ámense los unos a los otro, no pongan sus corazones en las cosas terrenas, sino en las divinas, se quedará en la tierra todo lo que es de la tierra e irá al Cielo todo lo que es del Cielo.

Hoy he tomado medios para hablarles de viva voz, pues en verdad les digo que también hablo de viva voz por medio de aquellos que proclaman mi Sagrada palabra, porque Yo soy la palabra, hoy mismo les he llamado a ser misericordiosos y compasivos, amarse los unos a los otros, por su cuenta nada harán, nada bueno, Yo soy el Señor de la vida, aquel que me ha abierto su corazón, que me ha dejado entrar en el, aquel que pone en práctica mi palabra, les amo a todos, benditos sean.

Pidan al Espíritu Santo y en el Espíritu Santo recibirán el Don de perfección, serán perfectos y santos.

Mis hijos muy amados quiero que haya oración de sanidad, Yo soy el Señor con ustedes, Yo soy el Señor que les da sanidad, más Yo pongo medios, reciban con fe mis pequeños según mi divina voluntad, aquello que de mi misma Divinidad quiero darles, les amo.

Mis hijos muy amados algunos les he dado don de lenguas y no practican estos dones que Yo les he dado, algunos de mis hijos les he dado don de interpretación de lenguas y callan, tienen temor.

Quiero que esta ofrenda sea hoy en desagravio por tantas ofensas que ha recibido mi Madre Santísima en el rechazo de muchos, dichosos los que aman a mi Madre muy amada, a mi Madre Santísima, le aman en mi mismo amor y mi mismo amor es en aquellos que aman a mi Madre.

Les Amo.